Apuntes de fútbol, política, goces y luchas
La enorme producción discursiva -muchas veces antagónica e irreconciliable- que se vierte sobre el mundial, aburre de puro simple en ambas direcciones. Ni la alegría popular de miles de personas puede resumirse en ver correr a 22 millonarios tras un balón, ni el conjunto de las operaciones financieras, económicas y sobre todo políticas, que se desarrollan tras las bambalinas de un evento de esta magnitud, logran esconder su carácter nada deportivo. La realidad es siempre más compleja.