¿Cómo crece el ajuste sobre trabajadoras y usuarias del Polo de la Mujer?

Crece la preocupación por las condiciones de trabajo en la dependencia y su reflejo en la atención a víctimas de violencia. Mientras, se debate el Presupuesto Provincial 2025 que sigue por la vía del ajuste

Por Victoria Marconetto para Enfant Terrible

A tono con la política nacional, a inicios de este año Llaryora anunció con orgullo que el Ministerio de la Mujer de la Provincia de Córdoba iba a ser uno de los ejes del ajuste provincial. “Ya no tenemos, hemos achicado”, respondía en LN+ ante los ojos del oficialismo nacional.

Lejos de ser un problema de títulos o categorías, hace años la situación de las y los trabajadores de la dependencia es crítica, con despidos sucesivos, sobrecarga y flexibilización. Tanto en la Asamblea Ni Una Menos, como en movilizaciones callejeras, era habitual encontrar a quienes están al frente de esas tareas, reclamar que el presupuesto destinado era más que insuficiente.

A poco menos de un año del triunfo de Javier Milei e inmediato alineamiento del Gobierno Provincial, ¿qué está pasando?

El deterioro desde adentro

Hacia el Encuentro Plurinacional, trabajadoras de la dependencia transmitían: “El gobierno de Llaryora decidió desjerarquizar el Ministerio a Secretaría, lo que significa un ajuste directo; vivimos cada vez mayor precariedad laboral, tanto de los programas económicos y los dispositivos psicológicos, que son cada vez más insuficientes para las mujeres que atendemos”.

Junto con esto, recibieron la notificación de que, al terminar su residencia, 77 profesionales pasarán a monotributo como única opción, perdiendo derechos laborales y toda perspectiva de estabilidad.

“Es así como, día tras día nuestra salud mental se ve deteriorada al estar en clima de constante presión, violencia institucional, con un sueldo que no nos alcanza para afrontar nuestras necesidades básicas y las de nuestras familias”, remarcan.

Su salario está por debajo de la línea de indigencia. En ese marco alertan sobre que la notificación mencionada, fuerza a la renuncia de trabajadoras y trabajadores, profesionales especialistas en la temática, a quienes les resulta imposible sostener sus puestos de trabajo.

Un espejo provincial del clima de incertidumbre que trasciende desde las líneas nacionales 144 y 137 de atención y acompañamiento, ante situaciones de violencia de género y delitos sexuales respectivamente.

¿Qué festejan?

Los costos que atraviesan profesionales en derecho, psicología y trabajo social que conforman las brigadas de asistencia, acompañamiento, contratación ante delitos sexuales y refugio, se refleja en las posibilidades que encuentran quienes necesitan un acompañamiento a la altura de las violencias.

En el Polo de la Mujer se articulan una serie de dispositivos de emergencia. Su existencia es parte del abanico de conquistas de un movimiento que, desde 2015, puso sobre la mesa la consigna “Vivas Nos Queremos”, pero su capacidad depende de los recursos concretos abocados a la respuesta. 

Si una persona en situación de violencia necesita algún tipo de subsidio urgente para independizarse económicamente las “becas” son alarmantes.

El subsidio de “Emergencia” que se otorga por única vez es de $200.000. “Nuevo rumbo Subsistencia” representa tres cuotas no renovables de $60.000. “Nueva vida” y “Nuevo rumbo alquiler”, $47.000 y $76.000 mensuales respectivamente.

En septiembre, una familia argentina necesitó $930.000 para no ser pobre (INDEC). No hace falta indagar demasiado para preguntarse, ¿cuántas becas “Nuevo Rumbo” son necesarias para cubrir un alquiler promedio en la provincia? ¿Cuántas para tener la tranquilidad de sostener una familia?

“No vamos a permitir que derechos que hemos conseguido las mujeres con años de lucha sean arrancados por un gobierno machista y patriarcal”, responden quienes ponen el cuerpo intentando acompañar violencias desde el organismo.

Imagen de la movilización contra Milei en Córdoba (30/10/2024). Foto: Julio Pereyra

El Estado es responsable 

En Córdoba se desarrolla el debate en comisiones sobre el Presupuesto Provincial para el periodo 2025. El mismo tomará estado público en las próximas semanas. Preocupa el sostenimiento del ajuste en áreas sensibles como vivienda, salud, educación y acompañamiento.

Del 52,9% (INDEC) de pobreza, más de dos tercios son mujeres (EPDH). Una de las consecuencias de toda crisis, malestar general de la población y profundización de la emergencia económica, es el incremento de las cifras de violencia, entre otras cosas, debido a la dificultad para independizarse económicamente.

Recientemente, el Centro de Almaceneros de la Provincia de Córdoba publicó en su informe que el 93% de los hogares se encuentran endeudados. En tanto, institutos como CEPAL señalan desde hace tiempo que el endeudamiento femenino tiene como particular fin, satisfacer necesidades esenciales como alimentación, salud y el pago del alquiler

Los cuidados y la desigualdad de ingresos como factor de empobrecimiento, son un problema complejo, sin embargo, necesario para entender lo que ordena las prioridades de la mayoría de las mujeres y disidencias sexogenéricas en Argentina. De ahí el sistema de presiones que enfrentan al intentar salir de una situación límite.

Trabajadoras de la Línea 144 detallaron a este medio que en el marco de un proceso de desmantelamiento de áreas de atención, despidieron a quienes realizaban las tareas de estadística y relevamiento cualitativo sobre denuncias. No hay datos oficiales.

Sin embargo, el recorrido de lucha que precede la coyuntura construyó un señalamiento para el presente. La negación como política de Estado tiene consecuencias concretas: femicidios, transfemicidios y crímenes de odio.

Ante esto el llamado desde los pasillos del Polo de la Mujer es concreto: “Trabajadoras y usuarias unidas con todo el movimiento feminista para defender las conquistas que hemos conseguido en la calle y organizadas”.

Fuentes consultadas:
Deudas, cuidados y vulnerabilidad: el caso de las mujeres de hogares de clases populares en la Argentina. URL: https://www.cepal.org/es/publicaciones/48017-deudas-cuidados-vulnerabilidad-caso-mujeres-hogares-clases-populares-la

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