La discusión por el cannabis en Argentina volvió a estar en agenda tras los dichos de la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, cuando el jueves pasado afirmó en una entrevista al aire que darán de baja trescientos mil (300.000) autorizaciones del Registro del Programa de Cannabis (Reprocann). En parte, la explicación que dio la ex funcionaria macrista es que se produce un “desvío de la marihuana hacia el mercado ilegal”.
Hasta ahora, el anuncio de Bullrich no quedó asentado en el Boletín Oficial como para que sea una realidad, pero puso en estado de alerta a las organizaciones cannábicas, ya que hay antecedentes que indican que la administración nacional avanza en desregular el programa.
Por otro lado, que sea la ministra de Seguridad quien realiza esta especie de anuncio es al menos llamativo, ya que el Reprocann se encuentra bajo la órbita del Ministerio de Salud. A su vez, es la misma ministra que ya tiene bajo su responsabilidad la muerte de un joven cocalero en Salta, hecho pasar por “narcotraficante” por Gendarmería y por la propia funcionaria para justificar su asesinato.
Bullrich metiéndose en una agenda de salud desde su rol en seguridad. ¿De qué está hablando realmente entonces?
Ya lo vas a entender
Para Marcos, integrante del frente Córdoba Se Planta (@cbaseplanta), “todo viene muy de la mano con el modus operandi que tienen desde que empezaron a gobernar, cuando de alguna forma empiezan a atacar o poner en mira cierta política pública o el acceso a un determinado derecho”.
Esta forma de operar, dice el activista cannábico, es la creación del enemigo interno: “como hacen con los mapuches en el sur, empezar a difamar y que la gente se ponga en contra para justificar las medidas represivas que quieren tomar”. En este sentido, asociar determinada actividad como el cultivo con un mercado ilegal, deja a la libre interpretación para avanzar contra quienes hacen uso del Registro para cultivar.
“Acá lo principal es que hay personas que pueden producir en su casa. Pero aunque haya o no un registro se planta igual, porque una persona que sabe que el cannabis le está ayudando a sí misma, o su padre o a su hijo, no va a dejar de cultivar por más que sea de manera clandestina. Entonces se está generando toda una exposición hacia esas personas”, añade Marcos.
El retroceso es notable. Volver a perseguir familias que cultivan por salud -en lugar de perfeccionar la política de atención sanitaria, la ciencia o la industria- con el circo armado en la frontera con Bolivia, más el fantasma del narcoterrorismo recorriendo las calles de Rosario, hace más fácil que el gobierno pueda instalar la narrativa para ver narcotraficantes en todos lados. ¿Cuál será la respuesta del movimiento cannábico frente a esta avanzada?
“Con el Reprocann se estableció un conformismo”
El mismo día que Bullrich realizaba el anuncio, una amplia y numerosa cantidad de organizaciones de trabajadores de la Salud se reunieron en el Hospital Garrahan, donde votaron por la realización de la «Gran Marcha Nacional en Defensa de la Salud Pública y de la Vida» para el próximo 27 de febrero, en un contexto de creciente preocupación por las políticas en salud pública del gobierno de Javier Milei y de su ministro de Salud, Mario Lugones.
En este marco, el tema del Reprocann podría entenderse adentro de este contexto de afectación de las políticas sanitarias. Desde Córdoba Se Planta, donde confluye la comunidad cannábica de Córdoba, es decir, usuarios/as, pacientes, cooperativas, Pymes, artistas, asociaciones civiles y grows, se encuentran también en alerta y comenzaron con reuniones para preparar acciones frente a los nuevos ataques.
A su vez, estos momentos de retrocesos sirven para retomar discusiones no solo sobre lo que se debe defender, sino lo que quedó pendiente y falta profundizar al momento de pensar políticas que realmente puedan resistir el paso del tiempo y la voluntad política de un gobierno de turno.
“El Reprocann es una conquista, pero no es un techo. En ese sentido tenemos una responsabilidad como activistas, en haberse establecido un conformismo cuando surgió el registro, porque de pronto se desmovilizó un montón y no se siguió trabajando, cuestiones a pensar dentro del movimiento, cuando hoy en día lo esencial es volver a activarnos y unirnos”, comparte Marcos.
Por lo pronto, desde Córdoba Se Planta se reunirán esta semana y pronto anunciarán nuevas actividades por sus redes sociales, tal como hicieron el año pasado a nivel local en el marco de la Marcha Mundial de la Marihuana, la cual significó un gran avance en términos de unidad del movimiento cannábico.
Foto de portada: Télam