A pesar de ser socios electorales y aliados en un presunto gobierno, las sillas del PRO estuvieron vacías en el debate electoral del día de ayer. Cuando fue consultado sobre esta ausencia luego del encuentro en la Facultad de Derecho de la UBA, Ramiro Marra respondió nervioso: “no se por qué no están, preguntale a la Cámara Nacional Electoral por qué no están”.

Horas antes del mismo debate, trascendió una denuncia pública hecha por la Cámara Electoral Nacional (CEN) contra La Libertad Avanza (LLA) por no entregar la cantidad suficiente de boletas para las próximas elecciones del 19 de noviembre en la ciudad capital de La Plata:

Según expresa el comunicado de la CEN: «(...) en las entregas realizadas hasta la fecha, la agrupación “La Libertad Avanza” ha presentado sus fajos en una cantidad sustancialmente menor de boletas, que, en algunas casos, no alcanza a un cuarto de la cantidad máxima sugerida (...)».

La noticia generó descontento hacia adentro del armado electoral de ultraderecha, ya que los encargados de la fiscalización y asimismo de garantizar las boletas, deberían ser el propio Mauricio Macri y su supuesto aparato territorial dispuesto a lo largo del país.

Es que, es sabido que una de las deficiencias de LLA es su poca experiencia y numerosidad de militantes al servicio de este tipo de tareas, siendo otras fuerzas políticas las que lo han garantizado, incluso el propio peronismo para quitar votos a JxC.

Según medios como La Política Online, debido al problema de las boletas, Javier Milei tomó como represalia no invitar a las figuras representativas y aliadas del partido macrista, como la propia Patricia Bullrich y Mauricio Macri. Mientras que otros medios consideraron que se trata de una jugada para darle “independencia” a la imagen de Milei, ya que, adentro de la LLA el nombre Macri les huele a rancio.

Pero tal vez existe otro problema, que va más allá de lo que se pretende mostrar en un escenario mediático como un debate, y tiene que ver con lo que denuncia la CEN: «(...) una entrega de boletas tan deficiente como la que se observa hasta aquí por parte de “La Libertad Avanza”, no se adecúa a las provisiones estimadas por este Tribunal, para el mejor desarrollo de la jornada comicial».

Ya es sabido que una carta a mano para la ultraderecha es el grito de "fraude", tal como lo hicieron en su momento Trump y Bolsonaro, los principales socios ideológicos de Milei en el continente. Es que, la ausencia de boletas podría ser un componente importante para agitar esta idea, que de entrada permite hablar de irregularidades en los comicios. De allí que la Cámara lo denuncie, ya que los mismos fiscales no estarían garantizando que sus propios votantes lleven adelante el ejercicio de sufragio, generando posibles ruidos el día de la elección.

A su vez, la CEN ya tuvo un antecedente en las elecciones generales pasadas, debiendo emitir un comunicado “frente a la invocaciones de fraude sin fundamento” que “desinforman a la opinión pública y socavan a la democracia como sistema de creencias compartidas”.

Las aclaraciones de la Cámara se debieron a la oleada de denuncias de fraude provenientes de sectores de LLA e incluso del propio Milei, quien no reconoció que hubo resultados limpios en las Elecciones Generales: “hubo irregularidades de semejante tamaño que ponen en duda el resultado”, expresó el economista en una entrevista con el periodista Jaime Bayly, donde también cuestionó al sistema nacional electoral: “está muy influenciado por el poder político”.

En realidad no queda claro si la ausencia del PRO en el debate corresponda a la idea de instalar una idea de "interna", a una estrategia performática, o si funciona más como una pantalla para, en el medio, ir montando un escenario de fraude ante una posible derrota del “libertario”.