Más de 100 dirigentes políticos, periodistas y referentes sociales fueron espiados ilegalmente por la Agencia Federal de Inteligencia (ex SIDE) durante el gobierno de Mauricio Macri. Entre las personas espiadas figuran la actual ministra de Mujeres, Géneros y Diversidades Elizabeth Gómez Alcorta, el ex diputado macrista Nicolás Massot, la diputada Gabriela Cerruti entre otros

El informe elevado por la interventora de la Agencia Federal de Inteligencia designada por el Ejecutivo Cristina Caamaño es contundente: "hubo un proceso sistemático de espionaje ilegal". Tras emitir un dossier donde se detalla el espionaje realizado a más de 100 personalidades de la política, el periodismo y el sindicalismo durante el gobierno de Macri, Caamaño realizó una presentación electrónica ante los juzgados federales de Comodoro Py que recayó en el juzgado número 8 a cargo de Martínez de Giorgi y del fiscal Di Lello.

A raíz de la investigación encabezada por Caamaño se pudo averiguar que una computadora de la AFI que estaba bajo la dirección de Gustavo Arribas era la encargada de hackear las casillas de mail de las personas espiadas. La denuncia presentada apela al art. artículo 4 incisos 2, 5 y 43 de la Ley de Inteligencia Nacional según los cuales "ninguna de las tareas de inteligencia y seguimiento fueron ordenadas ni autorizadas por ningún magistrado" por lo tanto es un caso de "inteligencia y espionaje ilegal".

Entre los espiados figuran militantes populares y feministas como la ex abogada de Milagro Sala y actual ministra de Mujeres, Géneros y Diversidades Elizabeth Gómez Alcorta quien declaró que será querellante en la causa. "Fueron años donde teníamos información del espionaje, pero no teníamos certezas. Yo supongo que me espiaron por mi rol de abogada de Milagro Sala, más allá de mi militancia política. Es raro, uno termina conjeturando por qué le podría interesar a los servicios los mails que uno manda" agregó.

No deja de sorprender que otros dirigentes espiados no eran opositores al macrismo sino aliados de gobierno como los dirigentes radicales Ernesto Sanz y Mario Negri, el periodista ultramacrista Luis Majul, la responsable de la Oficina Anticorrupción y militante del PRO Laura Alonso o el sobrino del genocida Vicente Massot, Nicolás Massot que fuera jefe del bloque de diputados del PRO entre otros.