Grupos organizados vinculados a la derecha boliviana secuestraron a la alcaldesa Patricia Arce y tras someterla a horas de vejaciones le arrojaron pintura roja y le cortaron el pelo. La tensión crece en todo el país ante el cuadro de protestas impulsadas por los candidatos conservadores Carlos Mesa y Luis Fernando Camacho quienes perdieron en primera vuelta ante Evo Morales y desconocen el resultado electoral.

Patricia Arce es alcaldesa de la localidad de Vinto en el departamento de Cochabamba, una pequeña ciudad de poco más de 60.000 habitantes en Bolivia. Arce es mujer, indígena y pertenece al Movimiento al Socialismo del reelecto presidente Evo Morales. Durante la tarde de ayer fue secuestrada, vejada y humillada por grupos organizados de la derecha boliviana que le cortaron el pelo y le arrojaron pintura roja mientras la insultaban. Tras permanecer horas privada ilegítimamente de su libertad, fue arrastrada por la calle a lo largo de 5km y obligada a prometer a sus captores que renunciaría al cargo.

Al ser rescatada por efectivos policiales Arce declaró "No voy a callar y si quieren matarme que me maten. Por este proceso de cambio voy a dar mi vida", y fue evacuada en una comitiva que fue apedreada. Tras los incidentes fue apedreada e incendiada la sede municipal de Vinto. Visiblemente angustiada y entre sollozos, Arce declaró que "Si los vinteños vienen y me piden que me vaya, me voy a ir".

La violencia y la tensión crecen en toda Bolivia después de que la oposición encabezada por Juan Carlos Mesa y el ultraconservador Luis Fernando Camacho desconocieran el resultado de las elecciones democráticas celebradas el pasado 20 de octubre. En dichos comicios resultó reelegido Evo Morales como presidente para el período 2020-2025. Desde entonces grupos organizados vinculados a Mesa y Camacho siembran el caos en ciudades opositoras al Movimiento al Socialismo.