Bruno Lonatti es un joven de la ciudad de Córdoba, al que se lo conoce desde Instagram o Tik Tok como “Bruno Rojo”, como figura en el perfil. Su participación en la política comenzó a la corta edad entre sus 12 y 13 años, en el centro de estudiantes de su colegio. Sus inquietudes y participación en debates de ideas lo llevaron a conocer la Juventud Comunista de Córdoba de la que hoy es parte.

Desde que sus videos comenzaron a tomar relevancia, ser compartidos y escuchados, acumulo empatía por quienes sienten cercanía por su mensaje, pero también amenazas por quienes piensan completamente distinto, más referenciados en la derecha o extrema derecha.

El pasado 24 de mayo, mediante sus redes Lonatti hizo público que había recibido mensajes donde le advertían: “si no querés que te pase nada malo, no hables nunca más de Milei en tus redes”, donde también exponían a sus afectos cercanos.

A un mes de este hecho, en diálogo con Enfant Terrible, el joven militante contó que los hechos no tuvieron mayor escalada, aunque reconoció que a gran cantidad de otros compañeros les había pasado lo mismo y atribuyó la violencia al destino de silenciar a través del miedo: “ante esta dinámica decidí que lo correcto era hacerlo público y llevarlo a las últimas instancias. Tuvo trascendencia pública, llegó a los medios tradicionales, a la cámara de Diputados de la Nación y también se expidió el Consejo Superior de la UNC. Esa trascendencia nos blinda y protege”.

Sobre la denuncia, Bruno menciona que se pidió al partido que lidera Javier Milei, La Libertad Avanza, repudiar los hechos, cosa que no sucedió, apenas hubo un llamado personal de Agustín Spaccesi, ex pre candidato a gobernador en las pasadas elecciones, quien tampoco se pronunció públicamente.

-¿Dónde crees que hay que poner el foco con estos actos que están siendo más frecuentes con los corrimientos a la derecha?

-Más allá del trabajo comunicativo que hago, contribuir al espacio de militancia y reivindicar día a día el Partido y la Juventud Comunista, considero que son de las razones por las que llegué a recibir estas amenazas. Creo que muchas veces damos por sentado que el libre debate de ideas y la convivencia democrática están asegurados en la Argentina, como un consenso general en la población y de la gran esfera política nacional. Pero al fin y al cabo con estos tipos de hechos nos terminan demostrando que es necesario un nuevo pacto democrático en el país.

Política a la cordobesa

Pasaron las elecciones provinciales, donde Martín Llaryora y el Justicialismo salieron victoriosos y serán gobierno los próximos cuatro años. Por su parte, el Partido Comunista integró las listas de Creo en Córdoba y en las próximas elecciones municipales del 23 de julio, también integrará esas listas bajo el nombre de “Córdoba de Todos” con Humberto Arturo Spaccesi como intendente, y Sylvia del Valle Peñaloza, como vice.

En relación a este panorama de disputa contra un PJ provincial que aún permanece al mando del Poder Ejecutivo hace más de 20 años, Bruno plantea que “se ha construido un proyecto de poder que tiene muy claro sus fines y objetivos y creo que eso no colinda para nada con resolver estos problemas que tenemos como ciudadanos de la provincia. La riqueza se concentra en la ciudad y vemos que el Interior termina bajo la marginalidad y la falta de oportunidades. Ni siquiera alejándonos tanto de la ciudad, salís del ejido urbano y las comunidades no tienen agua potable”.

“Ese es el nivel de desigualdad de la provincia, que se basa en un proyecto que sale de la fundación Mediterránea que es la que parió a Domingo Cavallo, creo que no nos vamos a mover de ahí, gobierne quien gobierne. Hay que construir una alternativa desde abajo”.

-Haces mención a un modelo asentado, ¿coincidís con ese modelo? ¿Dónde ves que funciona o no?

-Es muy claro. Sólo de soja produce 7.500 millones de dólares o más, en una de las commodities de la provincia. Produce el 20% de las exportaciones a nivel nacional, es decir es una provincia inmensamente rica que termina con uno de los niveles más altos de desigualdad del país. La situación habitacional es algo que nos preocupa, principalmente a mi generación. Yo formo parte de un partido y llevamos adelante una idea de inmobiliaria popular, que ya existe a nivel mundial, por ejemplo en Chile, en la Municipalidad de Recoleta, que tienen pocos recursos y han podido construir y garantizar alquileres sociales de fácil acceso.

-¿Dónde no están poniendo el foco los partidos de cara a las siguientes elecciones?

-Nos estamos alejando de las campañas propositivas, estamos cayendo en el consignismo, es terrible. Cuando construimos política tenemos que demostrar que nuestro proyecto es de concejalías populares y que es cercana al pueblo, que le podés tocar la puerta y hablar con ellos. Creo que si no salimos de eso nunca vamos a construir confianza, conciencia y después organización popular que lleve los cambios que necesitamos. No puede existir una campaña en la radio, la televisión y las redes sociales, creo que ese es el camino. Estamos trabajando para las municipales con nuestro candidato Hernán Yaszcnek, 5° candidato a concejal en la lista, un joven militante del Club Los Andes, donde es Secretario de Cultura.

Latinoamérica va

Entre las urgencias electorales, las disputas partidarias y la necesidad de compartir y acercar como comunicador la realidad de Latinoamérica, Bruno tiene muy presente las demandas de su generación. Los nacidos en los dosmiles y socializados con las crisis que esos momentos históricos marcaron nuestro país, hoy ven las dificultades de poder proyectar a futuro, conseguir trabajo en condiciones dignas, acceder a la vivienda en un contexto donde el sistema de alquileres termina colapsado y de “imposible acceso para irse a vivir solo, como uno de los principales objetivos cuando uno empieza a hacer su vida”.

Bruno cree profundamente en la política como herramienta de transformación social y afirma que “tenemos que responder a esto y con la responsabilidad que merece, principalmente pensando en que es una provincia tan rica”.

Desde chico se fue familiarizando con las distintas revoluciones y revueltas que han sido parte de la historia de la región, como el Cordobazo y la Revolución Cubana. De esta última, una de las figuras que tiene muy presente es la de Ernesto “el Che” Guevara, a quien recuerda desde “la consecuencia de lo que decimos y lo que hacemos, lo que más nos inspira del Che, es lo que nos motiva y a lo que vamos”.

-¿Cuál crees que es la función que está cumpliendo Cuba en materia de integración regional?

-Creo que es indiscutible, desde el aspecto comunicativo, cultural y hasta organizativo, ya que muchos proyectos no necesariamente de izquierda, progresistas que se han construido en Cuba. Es decir, cuántos exiliados han llegado a Cuba y construido su regreso, su construcción, acumulación y desarrollo de fuerzas en La Habana. Ni hablar del aporte a la paz, el acuerdo con las FARC (Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia) que tuvo no solo un costo político, sino de lo económico, porque por tomar ese rol en Colombia, Cuba terminó en la lista de países patrocinadores del terrorismo. Una estupidez, porque el propio Gobierno de Colombia lo reconoció como patrocinador de la paz y garante de eso.

“En los últimos años creo que el aporte en la integración y la construcción de organismos supranacionales es indiscutible. Principalmente porque previo a esta oleada progresista, el principal organismo supranacional era la OEA, que es hoy es contra todo lo que hay que luchar. Un organismo latinoamericano con la presencia omnipotente de EEUU es lo peor que nos puede pasar como países latinos”. 

-Desde Argentina, ¿ves que se viene aportando a esa construcción, desde la figura de Alberto Fernández? 

-Creo que no lo hizo en más de 3 años de gobierno, no lo hará en 6 meses. Ahora, apostar a este tipo de construcciones desde lo jurídico es fundamental. Hace al menos 8 años tenemos elecciones en el PARLASUR, por lo tanto, hay que aportar a esas construcciones para que sean organismos de los cuales no se pueda renunciar cuando asuma un gobierno de otro tinte político. No puede pasar que si la oleada progresista se corta como pasó por 4 a 6 años, esos organismos que tomaron hasta una década de construcción como en UNASUR se vengan abajo. Hay que construir los mecanismos para que sean una base sólida para poder construir hacia futuro.

“Creo que tenemos que aportar desde la Argentina porque nos beneficia completamente, más allá de nosotros, al mundo todo”.

-Pensando a futuro, está la propuesta de una moneda común entre países de Latinoamérica, ¿la ves viable? Pensando en cómo modificaría la relación entre países y continentes.

-Lo veo como un horizonte posible, además porque como entre nuestros países tengamos que comerciar en una moneda como el dólar termina siendo hasta ridículo. Se vuelve un sistema de dominación internacional profundamente injusto que nos somete a las reservas federales norteamericanas, no podemos continuar en este rumbo. Ni hablar en este momento donde nos ofrecen dos mundos en disputa, principalmente por la labor los BRICS donde preponderan Brasil, Rusia y China y proponen un mundo multipolar; mientras que desde la OTAN proponen un proyecto de dominación mundial, unipolar.