Palestina: para "The Lancet" las muertes indirectas amplían las cifras del genocidio

Según la revista de medicina británica, los palestinos asesinados y asesinadas en Gaza podrían llegar a ser hasta cinco veces más de lo aceptado por los organismos internacionales como la ONU.

La revista médica británica "The Lancet"* publicó una "carta" denominada "Contar los muertos en Gaza: difícil pero esencial", donde advierte que el total de palestinos asesinados sería de entre tres y quince veces mayor que las muertes reportadas por el Ministerio de Salud palestino y la ONU.

"No es inverosímil estimar que hasta 186.000 o incluso más muertes podrían ser atribuibles al actual conflicto en Gaza", advierten sus firmantes.

Sin embargo, el último reporte del Ministerio de Salud de Gaza —una dependencia del gobierno controlado por Hamás— publicado ayer, señala que son 38.713 los palestinos asesinados por Israel desde el 7 de octubre del año pasado, cuando Hamás incursionó en territorio ocupado por el Estado israelí.

En estos momentos, el Ministerio gazatí es el único organismo oficial que está registrando la cantidad de personas asesinadas. Estas estadísticas han sido aceptadas como "exactas" por la propia inteligencia israelí, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y la Organización Mundial de Salud (OMS), siendo solo impugnadas por las autoridades sionistas.

Pero entonces, ¿por qué y cómo calcula "The Lancet" un estimado de personas fallecidas en casi 186 mil, y no se ata a las cifras comunicadas por el Ministerio de Salud?

"Es probable que el número de muertes reportadas esté subestimado", expresaron los médicos investigadores Rasha Khatib (investigadora del American Advocate Aurora Health Institute y del Instituto de Salud Pública de la Universidad Beir Zeit, en Cisjordania ocupada), Martín Mckee (catedrático de Salud Pública Europea de la London School of Hygiene & Tropical Medicine y miembro del Comité Asesor Internacional del Instituto Nacional Israelí de Investigación sobre Políticas de Salud) y Salim Yusuf (profesor distinguido de Medicina de la Universidad McMaster y de Ciencias de la Salud de Hamilton).

Foto: Motaz Azaiza

La carta, que no es un estudio científico ni un informe, sino una "reflexión" de sus firmantes, parte de la premisa en la cuál "los conflictos armados tienen repercusiones indirectas en la salud, más allá de los daños directos causados por la violencia".

Los médicos hablan de "muertes directas" para referirse a las causadas por el impacto directo de las balas y las bombas, y de "muertes indirectas" como consecuencia de la destrucción de hospitales, la escasez de alimentos, agua y refugio, la incapacidad de la población para huir a lugares seguros, y la pérdida de financiación para la UNRRWA (Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en Oriente Próximo), una de las pocas organizaciones humanitarias que aún están activas en la Franja de Gaza.

Según Khatib, Yusuf y Mckee, hay cuatro muertes indirectas por cada muerte indirecta. Esta "estimación conservadora" se basa en un informe publicado en 2008 por la Secretaría de la Declaración de Ginebra sobre Conflictos Armados donde se hace referencia a "estudios que demuestran que mueren indirectamente entre tres y quince veces más personas por cada persona que muere de forma violenta". Aunque, el por qué se eligió la cifra de cuatro, no está fundamentado en la carta.

A su vez, tanto la ONU como otros organismos internacionales reconocen que la recopilación de datos es cada vez más difícil para el Ministerio de Sanidad de Gaza, debido a la destrucción de gran parte de la infraestructura. Según los médicos, el Ministerio “ha tenido que aumentar sus informes habituales, basados en las personas que morían en sus hospitales o que llegaban muertas, con información procedente de fuentes fiables de los medios de comunicación y de los primeros intervinientes”.

De esta manera, los detalles de los datos recabados se han visto degradados. “En consecuencia, el Ministerio de Sanidad de Gaza informa ahora por separado del número de cadáveres no identificados entre el total de víctimas mortales. A 10 de mayo de 2024, el 30% de los 35.091 muertos estaban sin identificar", detalla The Lancet.

Foto: Motaz Azaiza

En este sentido, Khatib, Mckee y Yusuf argumentan su opinión en el trabajo realizado por la organización no gubernamental Airwars, que a su entender lleva a cabo evaluaciones detalladas de los incidentes en Gaza y a menudo "descubre que no todos los nombres de las víctimas identificables están incluidos en la lista del Ministerio".

"La ONU calcula que, para el 29 de febrero de 2024, el 35% de los edificios de la Franja de Gaza habían sido destruidos, por lo que es probable que el número de cuerpos que siguen enterrados entre los escombros sea considerable, con estimaciones de más de 10.000. Aplicando una estimación conservadora de cuatro muertes indirectas por cada muerte directa a las 37.396 muertes reportadas, no es inverosímil estimar que hasta 186.000 o incluso más muertes podrían ser atribuibles al actual conflicto en Gaza", concluyen.

Los médicos advierten que si el conflicto terminara hoy, de igual manera seguirán produciéndose muertes en los próximos meses y años, por causas como enfermedades reproductivas, transmisibles y no transmisibles, y las anteriormente nombradas.

"Documentar la escala real es crucial para garantizar la responsabilidad histórica y reconocer el coste total de la guerra. También es un requisito legal exigido por la Corte Internacional de Justicia en el marco de la denuncia por genocidio", finalizan su carta.

*The Lancet es una revista médica británica, publicada semanalmente por The Lancet Publishing Group. Toma su nombre del instrumento quirúrgico llamado lanceta. The Lancet ha sido propiedad de Elsevier desde 1991, el actual editor es Richard Horton de Elsevier Properties, S.A.

Foto de portada: Motaz Azaiza

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