Se trata de Ramona Medina, vecina y comunicadora de La Poderosa en la Villa 31 quien hace 12 días no tenía hay agua corriente en su casa y hoy se suma a la lista de más de 890 casos confirmados de coronavirus

"Hay un virus que nos está consumiendo todos los días, nuevos casos, nuevos vecinos y nosotros seguimos sin agua" (…) "No tenemos lo más básico que necesitamos para higienizarnos. Yo quiero que Diego Santilli venga a mi casa y me diga cómo hago para mantener la higiene, cómo hago para lavar la verdura para cocinarle a mis hijas". Este es el relato de Ramona, quien hace más de una semana denunciaba su situación y la de muchas familias pertenecientes a los sectores populares de la Ciudad de Buenos Aires.

#BastaDeSilencio grita La Poderosa en un comunicado donde cuenta que: "Acaban de intubar a la Ramona". La vecina y delegada de la organización en "la 31" vive con 5 personas más y 4 de ellas son grupo de riesgo: "no sólo ella, insulino-dependiente, sino también todas las demás personas que habitaban su precaria vivienda, incluida una hija diabética, un suegro con problemas coronarios y otra hija en silla de ruedas, que no habla, no camina, no mantiene postura y requiere oxígeno nocturno, porque tiene síndrome de West y síndrome de Aicardi, una patología que le genera convulsiones refractarias no evolutivas" (...) "estuvieron 55 días aislados en esa misma casa, que hoy tampoco tiene agua y ya ni siquiera tiene a Ramona, porque la acaban de intubar".

Desde que el coronavirus llegó al país, la organización viene denunciando la falta de transparencia en las cifras, así como la falta de medidas por parte del gobierno a cargo de Horacio Rodríguez Larreta para dismunir las condiciones de emergencia que agravan las posibilidades de contagio. Diego Santilli, vice jefe de gobierno de la Ciudad, se hizo presente en los medios diciendo que "nunca antes se hicieron tantas inversiones en la Villa 31" y aseguró: "la mayoría de las casas ya tienen agua". Sin embargo, en el comunicado de La Poderosa se denuncia que mientras Santilli hacía estas declaraciones (...) "Ramona suplicaba un hilito de agua frente a sus canillas, contemplando los traslados en tandas de todos sus vecinos al hospital, entre cotidianos cortes de luz".