Luego de haber marchado veintitrés días desde la localidad de General Enrique Mosconi a la par de la Ruta Nacional 34 en el norte salteño, integrantes de comunidades wichí llegaron el 12 de agosto a la Ciudad de Buenos Aires. Buscan ser recibidas por las autoridades presidenciales ante las diversas necesidades que hay en sus territorios desde hace años: viviendas, agua potable, alimentos, salud, trabajo y entrega del título comunitario de sus tierras.

El cacique de la comunidad wichí 'Cacique loira de Tartagal', Jorge Altamarino, en diálogo con el periodista Puma Katrileo, explicó que la presidenta Magdalena Odarda y técnicos del Instituto Nacional de Asuntos Indígenas (INAI) se han acercado a escuchar sus demandas, pero no han resuelto medidas concretas para atenderlas. Además, el objetivo es llegar a ser recibidas por el presidente Alberto Fernández, reunión que no aún ha sucedido.

El Secretario de Relaciones Parlamentarias Fernando Navarro, en compañía de referentes del Movimiento Evita y el vicepresidente del INAI Luis Pilquiman, les comunicaron que su objetivo de reunirse con las autoridades podría concretarse si existiera mayor presencia de comunidades y organizaciones indígenas. Es por ello que desde el acampe se encuentran gestionando un viaje para que más "hermanos" lleguen de Tartagal a Buenos Aires.

Por su parte, Lucio Javier otro integrante de la comunidad wichí que se encuentra en el acampe, en conversación con ANRed explicó que: "hay comunidades que no tienen revelamientos y nadie se quiere hacer cargo de eso". Además, si bien hasta ahora existe una prórroga de la Ley 26.160 que impide los desalojos en los territorios registrados, la misma vence en el próximo 23 de noviembre: "nuestro reclamo es que no haiga más prórroga y se apruebe la Ley de Propiedad Comunitaria". También se han realizado revelamientos en el Registro Nacional de Comunidades Indígenas pero Lucio denuncia que:"no hay garantías" de que se respeten sus derechos o se atiendan sus necesidades.

Quien no otorga garantías es el Gobierno de Salta conducido por Gustavo Saenz. Por ejemplo, según contó Altamirano a Katrileo, el año pasado en horas de la madrugada hubo un desalojo a la altura del kilómetro 20 por parte de la policía provincial, desarmando las casas y robando sus animales. Debido a la falta de alimentación, les niñes sufren diversos problemas de salud como la desnutrición y algunes terminan falleciendo. La vida de las comunidades en convivencia con el monte se vuelve cada vez más dificultosa por la tala indiscriminada.

Hacen días fríos en Buenos Aires y se pronostican lluvias para más adelante. Desde el acampe solicitan abrigos y recursos para higienizarse, agua y alimentos.

Imágenes: Resumen Latinoamericano