Santiago del Estero: sicarios hostigan a mujeres de la comunidad Yacku Kachi Guaycuru

Imágenes compartidas por el Movimiento Campesino de Santiago del Estero (MOCASE) muestran como sicarios persiguen a dos mujeres mientras les arrojan palos a bordo de una camionatr. También denunciaron que los sicarios son contratados por el empresario Orlando Canido, dueño de la empresa de gaseosas Manaos. Los hostigamientos a la comunidad van desde ataques con armas de fuego, hasta envenenamientos de pozo de agua.

Orlando Canido, empresario dueño de gaseosas Manaos. Fuente: iProfesional

El Movimiento Campesino de Santiago del Estero (MOCASE) difundió imágenes donde sicarios a bordo de una camioneta persiguen y lanzan palos a dos mujeres integrantes de la comunidad indígena Yacku Kachi Guaycuru.

Ni la policía
Ni la jueza Falco (Rosa)
Ni la fiscal Sottini (Victoria)
Hacen nada para detener los brutales intentos de asesinato diarios de esta banda de sicarios de Orlando Canido.
Movimiento Campesino de Santiago del Estero (MOCASE)

Desde sus redes sociales denunciaron que desde el 12 de julio hasta la fecha, se han incrementado los ataques con armas de fuego, matanza de animales, rotura de alambres comunitarios, privación de agua, libre tránsito, entre otros hostigamientos. Tanto niñes, mujeres, y varones son víctimas de la persecución del empresario dueño de las gaseosas Manaos.

"Queremos seguir viviendo, produciendo alimentos para los pueblos, cuidando la madre tierra" finaliza el texto de la publicación en la red Instagram del MOCASE.

Las amenazas de desalojo y la persecución ordenadas por Canido en el territorio comunitario de la Comunidad Indígena de Yacu Kachi (Bajo Hondo) del pueblo originario Guaycuru, buscan expulsar a les campesines con el objetivo de avanzar con el desmonte y la plantación de monocultivos.

Debido a esta violación de los derechos comunitarios sobre la comunidad, el empresario fue sancionado con una orden de restricción que le prohíbe acercarse a los territorios. Sin embargo, esto no ha impedido que continúe usando su poder para violentar.