Mañana viernes 02/05 se realizará un hecho sin precedentes en la historia de Córdoba: la restitución y el re-entierro de restos óseos en territorio ancestral. Será a las 14 horas en el destacamento de guardaparques de Cerro Colorado, según se acordó entre el Gobierno Provincial, el Consejo Indígena y la Comunidad.
Los huesos encontrados en el 2018 datan de unos 5.000 años de antiguedad y pertenecen a comunidades originarias que habitaron la zona de lo que hoy es Cerro Colorado. Fueron hallados cuando se llevaba a cabo una obra de gasoductro para la región.
Desde aquel momento, la Comunidad Comechingona de Cerro Colorado empezó un proceso al que califican como “triste y vergonzoso”, ya que denuncian que son cinco años en los cuales el Estado Provincial se encargó de dilatar y burocratizar el enterramiento que finalmente sucederá mañana.
El pasado 19 de abril, en el marco del Día del Aborigen Americano, la Comunidad había previsto la reinhumación del patrimonio ancestral, pero a último momento recibió una carta donde el Consejo Indígena de la provincia desautorizó dicha acción alegando “la falta de condiciones legales y técnicas necesarias para ser autorizadas por las autoridades pertinentes”.
“Desde nuestras creencias y pensamientos, una vez que hagamos el enterramiento, este lugar tendrá calma. Creemos que va a llover en nuestro territorio luego de que nuestros ancestros vuelvan a su tierra” afirmó Gabriela Luján, vocera de la Comunidad Comechingona local, en diálogo con Enfant.
Cerro Colorado se encuentra sufriendo una severa sequía que genera problemas con el acceso al agua en toda la población, y sin desconocer al modelo agroexctractivista como causante de tal sequía, la comunidad le suma otra razón: la demora para sepultar a sus ancestros. En este sentido, Luján habló, además, sobre la importancia del hecho que tendrá lugar este viernes y respecto al conflicto con el Gobierno y el Consejo Indígena de Córdoba, el acompañamiento de las demás comunidades indígenas de la provincia y la necesidad de articular políticamente entre las mismas.
Luján afirma que hay un antes y un después del 19 de abril pasado, cuando el Consejo frustró el enterramiento acordado. En aquella oportunidad, cientos de personas provinientes de distintas comunidades originarias de Córdoba, docentes y estudiantes del Instituto de Cultura Aborigen (ICA) y de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC), realizaron una asamblea espontánea donde se pudo expresar el malestar colectivo que existe respecto a la relación del Estado con las comunidades.
“Nunca habíamos pensado que tendríamos que pasar tanta angustia y tristeza por querer enterrar a nuestros ancestros. Presentamos todos los papeles en tiempo y forma. Nos frustraron el primer intento porque supuestamente nos faltaba un trámite y ahora nos tuvieron que dar la razón ya que estamos en regla. Entonces ¿por qué nos hacen pasar tantos problemas en vano?”, enfatiza la vocera de la comunidad.
A pesar de lo sentido, desde la Comunidad le otorgan un sentido especial a lo sufrido. Entienden que aquella asamblea histórica inició un nuevo camino para las comunidades indígenas.
“A partir de allí se encendió la mecha. Aquella asamblea fue muy importante para lo que mañana realmente suceda el enterramiento, marcó un antes y un después, nos pudimos ver y conocer todas las comunidades, hacernos conocer los problemas particulares de cada una, pudimos afianzar nuestros lazos y avanzar un camino juntos, que es la única forma de visibilizarnos” describe Gabriela.
En el año 2018, ante el requerimiento de la Comunidad de que los restos no sean retirados del territorio, se logró la construcción de un laboratorio en Cerro Colorado para su respectivo tratamiento y conservación. Solo una pequeña parte de la muestra fue autorizada para ser analizada en la Universidad de La Plata y también en el Instituto Pasteur de Francia.
La Comunidad solicitó reciéntemente acceso al lugar y se llevó una magra sorpresa: “Hace cinco años que los cuerpos estan abandonados en una habitacion y dependencia del gobierno. El otro día, nuevamente, pedimos que nos abrieran la puerta y pudimos acceder. Estaban en un estado lamentable, todo sucio. El Estado sigue con el colonialismo sobre las comunidades, siempre nos quiere usar, invisibilizar, aplastar” acusa Luján.
Por último, la vocera advierte que el Consejo Indígena de Córdoba no le entregará los réstos a la comunidad sino al Jefe Comunal, Ariel Bustos (UCR), quien se comprometió en hacer la debida entrega para realizar la ceremonia de enterramiento.
Respecto a esto último, Luján señada dos problemas: “el Consejo, al hacer esto, nos niega como comunidad indígena y también expone su falta de representatividad ya que son dos personas nada más que deciden en nombre de un organismo que debería representar a todas las comunidades”.
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