El pasado 10 de febrero, vecines de Bialet Massé se organizaron para concentrar a las 14 horas en el Concejo Deliberante, buscando impedir que se apruebe ilegalmente la prefactibilidad de uso de suelo para el trazado Oeste de la Autovía de Montaña. Según el testimonio de Eugenia, vecina e integrante de la 'Asamblea de vecinos/as de Bialet Massé, estando afuera del edificio esperando la sesión, el mismo intendente que había anunciado el horario de las 14 horas, mandó un mensaje de whatssap diciendo que se había adelantado para las 11 horas y "se había olvidado de avisar". Hasta eso, el proyecto se había aprobado por unanimidad. Ante el atropello, les vecines dicidieron realizar un corte en el cruce de las rutas 38 y 55 que duró 4 horas, exigiendo que las autoridades se presenten a dar explicaciones, aunque nadie apareció.

Al día siguiente, una camioneta de la Municipalidad de Bialet Massé llegó hasta el barrio El Mirador y comenzaron a sacar fotos de las casas de las personas que habían concentrado en la jornada anterior. Al ver esto, vecines salieron a exigir explicaciones, razón por la cual la camioneta se retiró.

Cerca de las 17 horas, el mismo móvil regresó con tres policías que decían ser de Cosquín y venían de la fiscalía por una "denuncia" hacia uno de los vecinos que anteriormente llamó la atención a la camioneta. "Le empezaron a pedir los papeles de su terreno, a lo cual el compañero les pidió una orden, y sólo dijeron que había denuncias de vecinos y lo esperaban en la fiscalía. Tras esa pelea empezamos a caer todos a la casa del compañero para que no estuviera solo ante esta situación de violencia y de abuso de poder. Cuando comenzamos a caer, la policía y el camión se fueron". En ningún momento presetaron la orden judicial, ni dieron ningún dato que permitiera identificarlos.

A los 20 horas, los policías regresaron al barrio sacando fotos de las personas que habían salido anteriormente. Nuevamente "nos acercamos, empezamos a firmar y hacer preguntas para que se identifiquen y por qué sacaban fotos. Nos dijeron que no iban a darnos ningún dato y fueramos a la comisaría a pedir información" y se retiraron del domicilio.

Ante estos hechos, "queda más que claro que se están manejando de forma ilegal. Estos atropellos no pueden seguir sucediendo, ya los vivimos en el año 2018 en San Roque cuando empezaron a apretar a los vecinos para que se fueran solos de la traza sin ningún papel, sin ninguna denuncia".

Bajo la excusa del colapso de las rutas en la zona del Valle de Punilla, el Gobierno Provincial avanza por el oeste con la obra conocida como 'Autovía de Montaña' poniendo en peligro a las cuencas hídricas que dan de tomar a las localidades lindantes (en emergencia hídrica); al bosque nativo; al barrio El Mirador de más de 50 familias que se encuentra en medio del trazo; y a puntos arqueológicos ancestrales de la cultura tica - comechingona.

Dentro del mapa del Plan para la Integración de la Infraestructura Regional Suramericana (IIRSA), la traza planificada en Punilla forma parte de una autovía bio-oceánica para unir el Océano Atlántico con el Pacífico y facilitar el transporte de minerales, el llamado Eje Capricornio. La misma no posee Estudio de Impacto Ambiental ni tampoco cuenta con licencia social, ya que no nunca se hizo Audiencia Pública.