El ministro de Desarrollo Social Daniel Arroyo anunció que el gobierno está "estudiando" un proyecto para implementar la Renta Básica Universal que alcanzaría a 16 millones de personas. Destacó que forma parte de un "cambio estructural de lo social" derivado de la crisis global por el Coronavirus. Ante la tierra arrasada que dejó el macrismo, la implementación de un ingreso universal promovido por el estado abona la construcción de un nuevo paradigma del rol del Estado
Foto cortesía de Diego Bernardez
La semana pasada el ministro de Desarrollo Social de la Nación Daniel Arroyo participó de una conferencia virtual convocada por la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad Católica Argentina (UCA), donde expuso durante una hora y media el "cuadro crítico" en que se encuentra el tejido social argentino en relación al trabajo reconocido y el acceso a ingresos para vastas mayorías sociales.
En este sentido Arroyo señaló que el gobierno nacional está "estudiando" la implementación de una Renta Básica Universal que podría abarcar a 16 millones de personas. El subsidio es un modelo similar al implementado recientemente en Finlandia o en España donde se llama "Ingreso Básico Universal" y que contempla el pago de 560 euros mensuales libres de impuestos a personas desocupadas de entre 18 y 56 años.
Foto cortesía de Diego Bernardez
Tras los cuatro años de gobierno macrista las cifras del INDEC señalan que la pobreza generalizada llega al 35% de la población argentina, cifra que escala hasta el 50% entre jóvenes menores de 35 años. La informalidad laboral se eleva por sobre el 40%, esto sin reconocer los trabajos formales que revisten altas cotas de precarización o tercerización. Resta saber si la renta básica garantizará un ingreso fijo para colectivos excluídos del trabajo formal como la comunidad trans- travesti, los cesantes de larga duración, o los despedidos de más de 50 años que ya no tienen posibilidades de re insertarse en el mercado laboral.
¿Hasta dónde las élites revolucionarias estuvieron dispuestas, exigidas por las circunstancias, a modificar las jerarquías sociales y plasmar un igualitarismo difundido a partir de la retórica revolucionaria?
¿Qué se discute cuando se habla de una EPEC como posible Sociedad Anónima? ¿En dónde se pone el foco del tema energético frente a la actual coyuntura? ¿Qué nos dicen la historia y la experiencia de otras SA?