El día de ayer estuvo en Córdoba la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, quien visitó los destacamentos de la Policía Federal y Gendarmería Nacional, se reunió con su homónimo provincial, Juan Pablo Quinteros, y con el gobernador Martín Llaryora.

La visita se dio en el marco de la problemática narco que tiene como epicentro del debate a la ciudad de Rosario, donde el Gobierno Nacional mantiene un operativo conjunto que incluye a todas las fuerzas federales, incluyendo el apoyo logístico de las Fuerzas Armadas de la Nación, con el objetivo de “pacificarla”.

Durante una conferencia de prensa que dio en el Hotel Quorum junto a Quinteros, Bullrich anunció la creación de un Grupo de Operaciones Conjuntas (GOP) para la región Centro. Este “cuerpo de élite” estará conformado por “lo mejor” de las fuerzas federales y provinciales -en este caso entre la Policía de Córdoba, la Policía Federal, Policía de Seguridad Aeroportuaria y la Gendarmería Nacional.

Las fuerzas del GOP “llevarán a cabo la investigación criminal y va a ser capacitado por la DEA (Administración de Control de Drogas), que tiene financiamiento de agencias norteamericanas. Se ejercitará parte en Argentina y parte en Estados Unidos”, explicitó el ministro.

En el que consideró “un anuncio absolutamente importante y trascendente”, el ministro dijo que el grupo de élite trabajará en la región Centro (ya hay en funcionamiento grupos tácticos en la región NOA y NEA), por lo que necesitarán la contribución de los jueces locales para que las fuerzas provinciales puedan operar en otras jurisdicciones en el marco del GOP. Sin embargo, no brindó detalles sobre este punto.

Por otro lado, la ministra planteó la postura de la cartera de Seguridad respecto a la marihuana, brindando algunos datos que fueron contrastados por El Resaltador en la nota "Bullrich contra la marihuana: ¿Qué dijo en Córdoba?", a la que se puede acceder haciendo click aquí.

La DEA, vieja contratista de Patricia Bullrich

La articulación con la agencia norteamericana por parte de Patricia Bullrich no es de hoy, ya que durante el Gobierno de Mauricio Macri, cuando cumplía la misma función como ministra, hizo de “puerta de entrada” de la misma. Esto lo advirtió en su momento el periodista e investigador Julián Maradeo, autor del libro La DEA en la Argentina: una historia criminal.

Como ministra del macrismo, Bullrich habilitó a la agencia para elegir funcionarios, manejar financiamiento “en negro” y crear y coordinar grupos operativos conjuntos con absoluta discrecionalidad en Argentina, algo que en su momento Maradeo cuestionó en 2022. Aquel año, como oposición, el diputado Cristian Ritondo (PRO) llevaba la propuesta de crear una Agencia Federal Antinarcotráfico al Congreso de la Nación.

Por otro lado, cursando en el Mes de la Memoria, donde el 24 de Marzo en Argentina se conmemora un nuevo aniversario del golpe cívico-militar de 1976, que dio origen a una de las dictaduras más sangrientas de la historia nacional y latinoamericana, cabe recordar el rol de la DEA. En aquel entonces, la administración norteamericana, creada en 1973 por el gobierno de Richard Nixxon, funcionó como pantalla por parte de Estados Unidos para obtener mayor control sobre los países de América Latina en el marco del Plan Cóndor.

A su vez, tal como hemos expuesto en este medio a raíz de la militarización narcoterrorista que viene atravesando Rosario, la profundización de la articulación con la agencia norteamericana se enmarca en la intencional entrega de la soberanía nacional, que se evidencia con la presencia de funcionarios de la Casa Blanca en la Vía Troncal Navegable, el Río Paraná, mal llamada “Hidrovía Paraná-Paraguay”.

*Nota elaborada con colaboración de El Resaltador