La Peste Porcina y la posibilidad de ser sede pandémica en Argentina
Desde hoy Argentina se encuentra en emergencia sanitaria por un brote de Peste Porcina Africana en Haití y República Dominicana. Se trata de la misma enfermedad que obligó a China sacrificar más de 100 millones de cerdos en 2019. Por la escasez de reses porcinas en la República Popular de China se inició un memorándum de entendimiento con Argentina para construir criaderos e incrementar las exportaciones demiles de kilos de carne porcina. ¿Los dólares del acuerdo "porchino" valen otra pandemia?
Hoy el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA) declaró la alerta sanitaria en todo el país por un brote de Peste Porcina Africana (PPA) en República Dominicana y Haití. Según la Resolución 564/2021 del Boletín Oficial, la medida se implementó “con el fin de disminuir el riesgo de ingreso, exposición y diseminación del virus en huéspedes susceptibles, tanto cerdos domésticos como asilvestrados y jabalíes en todo el Territorio Nacional”.
Si bien la medida se aplicó hoy en Argentina, los brotes en los países caribeños fueron detectados en julio (en RD) y septiembre (en Haití) de este año
Según el organismo sanitario, la PPA se transmite a través la sangre, alimentos cárnicos no procesados térmicamente, cadáveres, etc. Además, tiene alta letalidad para los animales -no así para las personas- y no existe una vacuna eficaz que permita su contención.
El desarrollo de la PPA está notablemente relacionada a las condiciones de vida de los animales, la adecuada seguridad alimentaria para la higiene y alimentación de los animales. Su origen se encuentra la industria alimentaria de las empresas multinacionales de la carne, globalizada a través de los sistemas de transporte de los animales y productos.
Aunque se trata de una enfermedad exótica y todavía no fue detectada en Argentina, ha mostrado gran capacidad de propagación en distintos puntos del mundo durante los últimos 10 años. Uno de los más recientes fue en 2019 en China, el mayor consumidor de carne porcina del mundo, aunque también se habían detectado casos en 2018 y sacrificado más de mil cerdos. Debido a la permanencia y expansión de la enfermedad por el país, en 2019 el gobierno chino decidió sacrificar a más de 100 millones de cerdos.
China y las megafactorías en Argentina
Posterior a la emergencia alimentaria que azotó a China, incluyendo en términos económicos, comenzó a tramitarse entre China y Argentina el conocido Acuerdo Porcino con China para producir y exportar carne desde este lado del océano. En ese entones, la Cancillería estaba a cargo de Felipe Solá, quien renunció a su cargo después de las PASO.
Desde un principio, este acuerdo ya ha sido ampliamente repudiado por distintas organizaciones sociales, ambientales, políticas, sectores de la ciudadanía en general, estudiantes, docentes, profesionales de las ciencias, entre otros. Los motivos son coherentes a los peligros que conlleva la instalación de megafactorías de cerdos, además de la PPA, la contaminación, el uso excesivo de agua, la degradación del suelo, etc.
A pesar de las advertencias y quejas de la población, en la provincia de Chaco el gobernador Capitanich, había anunciado a mediados de este año un acuerdo con la empresa china Feng Tian Food para la instalación de un complejo agroindustrial que incluía una megafactoría.
A pesar de tratarse de un acuerdo que conlleva grandes riesgos sanitarios, ambientales y por ende económicos, no hay transparencias por parte de los gobiernos nacionales y provinciales acerca de esta nueva industria que Argentina pretende llevar a cabo. La mayor certeza es que, si no se tienen los riesgos de convertirnos en una nueva sede de pandemias, esto puede traer mayores consecuencias que terminen profundizando las crisis que todavía no son resueltas.
¿Hasta dónde las élites revolucionarias estuvieron dispuestas, exigidas por las circunstancias, a modificar las jerarquías sociales y plasmar un igualitarismo difundido a partir de la retórica revolucionaria?
¿Qué se discute cuando se habla de una EPEC como posible Sociedad Anónima? ¿En dónde se pone el foco del tema energético frente a la actual coyuntura? ¿Qué nos dicen la historia y la experiencia de otras SA?