Las presidenciables: ¿quiénes son las candidatas 2022?  

En la historia reciente, tuvimos una presidente electa y reelecta: Dilma Rousseff (PT). Y muchas otras candidatas a la Presidencia de la República, como Marina Silva (por el PV y después por el PSB, hoy en la REDE); Heloísa Helena (en ese entonces por el PSOL, hoy en la REDE); y Luciana Genro (PSOL). Todavía no tuvimos una vicepresidenta electa, pero también hubo varias candidatas, como Sonia Guajajara (PSOL); Manuela D’Ávila (PCdoB); Ana Amélia (en el PP, hoy en el PSD); y Kátia Abreu (en el PDT, hoy en el PP).

Con el cumplimiento del plazo para la realización de las convenciones de los partidos en la elección de candidatxs de cara a octubre, se postularon 12 a la Presidencia y 11 a la Vicepresidencia, ya que Jose Maria Eymael (DC) todavía no oficializó un(x) vicepresidente ^[1]. Entre ellxs, hay cuatro candidatas a la Presidencia: Simone Tebet (MDB), Sofía Manzano (PCB), Soraya Thronicke (União Brasil) y Vera Lúcia (PSTU). También hay otras cinco candidatas a vice: Ana Paula Matos (PDT), Fátima Pérola Negra (PROS), Kunã Yporã (PSTU), Mara Gabrilli (PSDB) y Samara Martins (UP).  

Aunque los candidatos que aparecen en primer y segundo lugar en las encuestas de intenciones de voto lideran listas masculinas, Lula (PT)/Alckmin (PSB) y Bolsonaro/Braga Neto (ambos del PL); hay dos listas femeninas, Tebet/Gabrilli y Vera/Kunã; y otras cinco mixtas: Ciro Gomes/Ana Paula (PDT), Pablo Marçal/Fátima (PROS) y Soraya/Marcos Cintra (União Brasil). La lista del PROS se encuentra sub judice.

Circunstancias

Vera Lúcia es negra, nordestina y forma parte del movimiento sindical. Ya fue candidata a la Presidencia en 2018 y obtuvo 55.762 votos (0,05% de los votos válidos). Con la representante indígena Kunã Yporã como vice, también conocida como Raquel Tremembé, esta lista, además de femenina, es una composición interétnica. Vamos a ver si, en esa situación, ella consigue sumar votos. 

Sofia y Samara representan otros pequeños grupos de izquierda y sus presencias en el proceso electoral buscan marcar posiciones políticas, sin mayores pretensiones electorales. Así, como el PSTU, sus partidos dispondrán de un tiempo irrisorio en el horario gratuito de radio y TV.   

La candidatura de Fátima todavía dependerá de una disputa judicial por la presidencia del PROS y su postulación podría ser anulada. 

Ciro Gomes se candidatea por cuarta vez a la presidencia. En 2018, disputó con Kátia Abreu como vice y quedó en tercer lugar en primera vuelta, con 13,3 millones de votos (12,5% de los votos válidos). Ahora, a pesar de seguir en tercer lugar según las encuestas, no consiguió hacer alianzas con otros partidos. También está repitiendo la fórmula mixta, al elegir a una compañera de fórmula del propio PDT, Ana Paula Matos, actual viceprefecta de Salvador. 

Tebet es senadora desde 2014, tuvo participación destacada en la Comisión Parlamentaria de Investigación (CPI) sobre Covid-19, fue prefecta de Três Lagoas (MS) y vicegobernadora de Mato Grosso do Sul. Viene manteniendo su postulación hace meses en el ámbito de la llamada “tercera fuerza”; y, a pesar de notorias defecciones dentro del propio MDB, tiene el apoyo de la federación PSDB-Cidadania, que indicó a Gabrilli para ser su vice. Gabrilli fue electa senadora por São Paulo, en 2018, con 6,5 millones de votos y tiene una trayectoria destacada en la defensa de los derechos de personas con necesidades especiales. Se trata de la lista femenina con mejores condiciones para crecer. 

La candidatura de Soraya apareció de forma inesperada, después de la desistencia de Luciano Bivar, presidente de União Brasil, una leyenda resultante de la fusión entre el PSL y el DEM. Luego de dejar atrás las precandidaturas de los ex ministros Luís Henrique Mandetta y Sérgio Moro, Bivar eligió a Soraya a última hora, después de una larga conversación con Lula. 

Contradicciones

De los 156.454.011 electores aptos para votar en las elecciones de octubre, 82.373.164 (53%) son mujeres y 74.044.065 (47%) son hombres. En teoría, esa correlación favorece el crecimiento de las candidatas. Los candidatos que lideran las encuestas son conocidos por el conjunto de electores y se benefician del recall de elecciones anteriores; mientras que las candidatas, a excepción de Vera Lúcia, disputan por primera vez las elecciones presidenciales. Es probable que crezcan, en alguna medida, cuando sean más conocidas.

Volverse más conocidas nacionalmente no es consecuencia obvia de cualquier campaña. El país tiene extensión continental y son elevados los costos asociados, de comunicación, transporte y seguridad. Vera Lúcia y Sofia sólo tendrán 7 segundos en cada bloque de horario gratuito en la radio y la TV. Mucho mejor es la situación de Simone y Soraya, ambas con 2 minutos y 16 segundos, tiempo sólo inferior al de Lula (3 minutos y 20 segundos) y Bolsonaro (2 minutos y 40 segundos). 

No obstante, existe una relación de antropofagia electoral entre las dos candidatas que más disponen de activos partidarios. Ambas son senadoras por Mato Grosso do Sul y van a dividir los votos en su principal base electoral. Hay que preguntarse por qué Bivar, al desistir de su candidatura, promovió, justamente, a una candidata de MS. ¿Sería para dificultar un eventual despegue de Simone, en represalía por no haber sido bienvenido como el candidato de la “tercera fuerza”?

Lula se mantiene como favorito hasta en las encuestas contratadas por Bolsonaro. Pero todavía es incierta la diferencia entre las preferencias por Lula y la suma que indican otros candidatxs. Por la última DataFolha, Lula tendría 52% de los votos válidos, venciendo en primera vuelta ^[2]. Pero es una diferencia que está dentro del margen de error de esa encuesta y que también oscila en otras.  

El eventual crecimiento de las candidatas presidenciables debería quitar votos, en alguna medida, a los candidatos favoritos. Según los sondeos, Lula es el preferido entre las mujeres, mientras que Bolsonaro lidera en Mato Grosso do Sul. Bolsonaro puede perder votos por la tendencia regional y Lula por la de género. Es improbable que ese crecimiento eventual lleve a alguna candidata a la victoria, pero puede ser decisivo para jugar la disputa en segunda vuelta, que tiende hasta ahora a realizarse entre las dos listas masculinas.  

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^[1] Al momento de publicar esta traducción, el veterano José Maria Eymael y el economista João Barbosa Bravo componen la fórmula completa de la lista por la Democracia Cristiana (DC). (N. de la T.).

^[2] Según la última encuesta de DataFolha (1 de septiembre), Lula lidera con el 45% y Bolsonaro con el 32% de los votos válidos. (N. de la T.).