El primer ministro Boris Johnson convocó a una rueda de prensa para este jueves donde, según fuentes de la BBC, anunciará su dimisión como jefe del ejecutivo británico. La salida del mandatario se da en el marco de una profunda crisis política que arrastra su gobierno y su partido desde 2020. El Partido Conservador deberá designar a un sustituto que termine el mandato de Johnson hasta una nueva convocatoria a elecciones en 2024.
La renuncia del premier británico sobreviene después de que al crisis política desatada por las fiestas privadas realizadas en plena pandemia y durante el estricto confinamiento alcanzaran estado público. Las fotos de Johnson brindando con altos funcionarios del gobierno generaron un fuerte rechazo popular. Por otro lado, en la última semana numerosos ministros de su gobierno presentaron sus respectivas renuncias.
Otra polémica que sacudió fuertemente el crédito político del líder conservador fueron las denuncias de abuso sexual contra el diputado Christopher Pincher, acusado de manosear a varios trabajadores en un club privado. Pincher, responsable del área de "disciplina" del partido conservador emitió un comunicado disculpándose tras ser denunciado por los dos hombres afectados.
Una fuente de Downing Street informó a la BBC de que Johnson consensuó su salida del gobierno con el jefe del grupo 1922 del Partido Conservado, Graham Brady. “El primer ministro ha hablado con Graham Brady y ha accedido a dimitir a tiempo para que haya un nuevo líder para la convención de octubre”, apuntaron desde la cadena británica.
Este jueves, a las 15 horas en el Museo de Antropología iniciará un taller abierto para conocer cómo se registran los malos tratos en los contextos de encierro y luego un conversatorio sobre la creación de un mecanismo local para la prevención de la tortura estatal.
Durante las protestas frente al Ministerio de Capital Humano el pasado 10 de abril, un manifestante perdió la visión de un ojo como resultado de la represión policial
En un contexto de recesión, ajuste y caída histórica del ingreso de los argentinos (salarios, jubilaciones y prestaciones), el tarifazo en los servicios públicos impacta negativamente en la economía de las familias y es otro mazazo a la actividad económica, empujando aún más la recesión.
